TITULO ORIGINAL: Goemon
AÑO: 2009
DURACIÓN: 128 min.
PAÍS: Japón
DIRECTOR: Kazuaki Kiriya
GUIÓN: Kazuaki Kiriya, Tetsurô Takita
MÚSICA: Akihiko Matsumoto
FOTOGRAFÍA: Kazuaki Kiriya
REPARTO: Yosuke Eguchi, Takao Osawa, Ryoko Hirosue, Jun Kaname, Gori, Erika Toda, Susumu Terajima, Eriko Sato, Tetsuji Tamayama, Mayuko Fukuda, Masatô Ibu, Fumiyo Kohinata
PRODUCTORA: Goemon Partners
En 1582, Hideyoshi Toyotomi dirige con extrema crueldad el destino de Japón y no oculta sus planes de expansión. Su llegada al poder fue fruto de una traición, la que acabó con el general Nobunaga Oda, y su secreto se encuentra oculto en una misteriosa caja. Goemon, se convertirá en la peor amenaza de Toyotomi cuando descubra el complot.
Nueva película del controvertido director de Casshern, basada en esta ocasión en Ishikawa Goemon, un ladrón del folklore japonés que nació en 1558. Según la leyenda era un guerrero ninja que robaba a los ricos para dárselo a los pobres, como un Robin Hood oriental, aunque hay muy poca información histórica sobre él.
Debido a esto, se ha convertido con el tiempo en un gran héroe popular. Su fama creció durante el periodo Azuchi-Momoyama, cuando Oda Nobunaga, primero, y Toyotomy Hideyoshi, después, gobernaron Japón. Algunas leyendas hacen de él un ninja, alumno de Momochi Sandayu. Otras historias aseguran que fue un samurái renegado, convertido en ronin, llamado Kuranoshin Sanada.
Ahora, durante el festival internacional de cine fantástico y terror de Sitges, Kazuaki Kiriya nos muestra una producción que pasa por el tamiz infográfico uno de los momentos decisivos de la historia de Japón y lo convierte en una épica historia de fantasía. Goemon está realizada con excesivo uso de efectos digitales, una apuesta visual que dota la película del más puro estilo anime.
Con un montaje trepidante, tiene momentos que pueden llegar a marear y despistar al espectador. Pero la historia está estructurada de forma comprensible, para no perder detalle, ni de los muchos personajes, ni de las relaciones que los une.
Una gran historia repleta de acción, emoción, intensidad y humor. Un coctel de sensaciones que consigue mantener la atención del público durante sus más de dos horas de duración. La película puede pecar de disponer más metraje del necesario, sobre todo, viendo como durante el desenlace final, los sucesos se desarrollan a trompicones de forma algo brusca.
Los personajes, algunos muy logrados, están interpretados de forma más que correcta. La banda sonora es simple pero emocionante y acompaña perfectamente la inmensidad de las imágenes, que te sumergen en el ambiente de la película.
La parte visual es lo más atractivo de la película, tiene una fotografía y composición de planos preciosos. Juega mucho con los colores, resaltando las tonalidades hasta llegar a extremos imposibles. El guión está lleno de giros, flashbacks y personajes, que a priori parece llevar a la confusión, pero al final queda todo atado, llevando el clímax hacia unas expectativas épicas desmesuradas. Una película emocionante de principio a fin, que ha recibido una excelente ovación por parte del público.
AÑO: 2009
DURACIÓN: 128 min.
PAÍS: Japón
DIRECTOR: Kazuaki Kiriya
GUIÓN: Kazuaki Kiriya, Tetsurô Takita
MÚSICA: Akihiko Matsumoto
FOTOGRAFÍA: Kazuaki Kiriya
REPARTO: Yosuke Eguchi, Takao Osawa, Ryoko Hirosue, Jun Kaname, Gori, Erika Toda, Susumu Terajima, Eriko Sato, Tetsuji Tamayama, Mayuko Fukuda, Masatô Ibu, Fumiyo Kohinata
PRODUCTORA: Goemon Partners
En 1582, Hideyoshi Toyotomi dirige con extrema crueldad el destino de Japón y no oculta sus planes de expansión. Su llegada al poder fue fruto de una traición, la que acabó con el general Nobunaga Oda, y su secreto se encuentra oculto en una misteriosa caja. Goemon, se convertirá en la peor amenaza de Toyotomi cuando descubra el complot.
Nueva película del controvertido director de Casshern, basada en esta ocasión en Ishikawa Goemon, un ladrón del folklore japonés que nació en 1558. Según la leyenda era un guerrero ninja que robaba a los ricos para dárselo a los pobres, como un Robin Hood oriental, aunque hay muy poca información histórica sobre él.
Debido a esto, se ha convertido con el tiempo en un gran héroe popular. Su fama creció durante el periodo Azuchi-Momoyama, cuando Oda Nobunaga, primero, y Toyotomy Hideyoshi, después, gobernaron Japón. Algunas leyendas hacen de él un ninja, alumno de Momochi Sandayu. Otras historias aseguran que fue un samurái renegado, convertido en ronin, llamado Kuranoshin Sanada.
Ahora, durante el festival internacional de cine fantástico y terror de Sitges, Kazuaki Kiriya nos muestra una producción que pasa por el tamiz infográfico uno de los momentos decisivos de la historia de Japón y lo convierte en una épica historia de fantasía. Goemon está realizada con excesivo uso de efectos digitales, una apuesta visual que dota la película del más puro estilo anime.
Con un montaje trepidante, tiene momentos que pueden llegar a marear y despistar al espectador. Pero la historia está estructurada de forma comprensible, para no perder detalle, ni de los muchos personajes, ni de las relaciones que los une.
Una gran historia repleta de acción, emoción, intensidad y humor. Un coctel de sensaciones que consigue mantener la atención del público durante sus más de dos horas de duración. La película puede pecar de disponer más metraje del necesario, sobre todo, viendo como durante el desenlace final, los sucesos se desarrollan a trompicones de forma algo brusca.
Los personajes, algunos muy logrados, están interpretados de forma más que correcta. La banda sonora es simple pero emocionante y acompaña perfectamente la inmensidad de las imágenes, que te sumergen en el ambiente de la película.
La parte visual es lo más atractivo de la película, tiene una fotografía y composición de planos preciosos. Juega mucho con los colores, resaltando las tonalidades hasta llegar a extremos imposibles. El guión está lleno de giros, flashbacks y personajes, que a priori parece llevar a la confusión, pero al final queda todo atado, llevando el clímax hacia unas expectativas épicas desmesuradas. Una película emocionante de principio a fin, que ha recibido una excelente ovación por parte del público.
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